• Skip to content
  • Skip to secondary menu
  • Skip to primary sidebar

mallpocket.com

lunes, 12 abril - 2021

Header Right

  • Revista Secciones
    • Central
    • Ctrl+Alt+Supr
    • Opinión
    • Password
    • Placard
    • Plazoleta
    • Shuffle
    • TimeCode
    • Spotlight
    • What if
  • Edición Nº 50Fútbol-era/ Mayo 2018
  • El Parche Las mentes de MP

Siguenos en:

Siguenos en Facebook Fútbol en Instagram para ti Siguenos en Twitter Siguenos en Behance
Mostrar menu
  • Actualidad
    • Noticias
    • Eventos y Concursos
    • Virales
    • Datos Cocteleros
  • Editorial
    • Crónica
    • Entrevistas
    • Ficción
    • Reportaje
  • Gráfico
  • Educación
    • Becas y Convocatorias
    • Inscripciones
    • La U
  • Blog
    • “1, 2, TIC” – Wilson Escobar
    • “Básicamente” – Camilo Márquez
    • “Cinenfermos” – André Didyme-Dôme Fuentes
    • “Temazo” – Jorge Asmar
    • “Top Mode” – Sandra Franco
    • “Intemporal”

Estúpido y sensual intelecto

24 noviembre, 2017 by MallPocket Leave a Comment

Twittear

[URIS id=5236]

Por Jaime Espitia @jaimespitia

El episodio siete de la tercera temporada de Futurama titulado El día en que la Tierra se quedó estúpida trata sobre unos cerebros voladores provenientes de un planeta desconocido en el mundo ficticio creado por Matt Groening, estos tienen la capacidad de eliminar la conciencia de los humanos y volverlos inmediatamente estúpidos en el año 3.000. Todos los mortales, efectivamente, son consumidos por la pendejada, excepto el más estúpido antes de su invasión, Fry, uno de los protagonistas de la serie, por lo que es él quien puede salvar al mundo de la temible irrupción, buscando en su mente la parte más inteligente de sí mismo y pretendiendo recuperar a su gran amor, Leela.

Precisamente en MALLPOCKET, este capítulo nos generó un fuerte cuestionamiento y más allá de esto, podríamos decirlo, una necesidad de suposición que resultó en una sola pregunta y es ¿qué pasaría si se conquistara exclusivamente con el intelecto? A menudo hemos estado acostumbrados y educados por las maravillosas películas hollywoodenses a que la atracción es netamente física, los protagonistas son bellos y lo más importante es conservarse en la vejez, —por cierto, estos actores en la mayoría de los casos envejecen ejemplarmente—.

Pero, ¿dónde queda el intelecto? Corre por las calles de la ciudad, de bar en bar y a través de las conversaciones un sutil pero interesante refrán, asesino y halagador a la misma vez, “lo que importa es lo que lleva dentro”. No sean malpensados, por favor, pero tampoco se refieran a que los sentimientos son todo lo que está bien o lo único que importa, porque muchas infidelidades comprueban que estos quedan en un último lugar cuando el físico pasa a un primer plano, pero no se preocupen, el intelecto nos salvará, o eso esperamos en nuestro mundo supositorio.

Si el físico no importara ya no habría de qué preocuparse, bueno, por lo menos nadie tendría que arreglarse, maquillarse o pensar en qué ponerse, pues la mente lo tendría todo solucionado, solo bastaría con leer un buen par de libros de George Orwell, García Márquez y por qué no, hasta de Michel Focault para salir preparado a las calles. Las charlas en las que surgen temas como “me gusta pero es un pendejo, le sobra cuerpo pero le falta cerebro” desaparecerían, y la Chilindrina jamás volvería a decirle a nadie “lo que tienes de menso, lo tienes de menso”, porque la mente gobernaría en el amor, en las relaciones sociales, en el mundo. Los grandes filósofos volverían a estar de moda y, por supuesto, de boca en boca, ya que al mejor estilo de Schopenhauer solo con decir “La vida consiste en la repetición constante del placer” pondríamos las cartas sobre la mesa a esa persona que tanto deseamos.

Por otro lado, desvanecerían los piropos tipo “uy, qué ricas tetas” pues serían reemplazados por un simple “qué bella neurona la que brota de tu cabeza” o “¿puedo comerme tu intelecto?” Después de todo, no podemos retrasar el envejecimiento y aunque en un futuro no se pueda conquistar con la belleza, la inteligencia será hacedora de nuevas compañías o si no pregúntenle a Bukowski, un intelectualoide que con su buen repertorio de frases ha tenido a cuantas ha querido a sus pies.

Lea también: ¿Qué hablamos los hombres cuando tomamos pola?

Probablemente la publicidad quebraría, desaparecerían los comerciales de super modelos, cuyo rostro es perfectamente simétrico, ya no habría que vender prototipos, por ende no importaría si son altos, bajos, flacos, gordos, todos se medirían por su corteza cerebral, no por su estado corporal, además dejarían de buscar a su media naranja  para encontrar a su medio cerebro. Las citas ya no serían en un café, porque qué cliché, los nuevos moteles: las bibliotecas, pues allí un buen par de letras sería todo lo que estaría bien para cobijarse bajo las texturas de las páginas. ¡Oh, querida y sensual bibliotecaria!

Los realities al estilo Jersey Shore, en el que premian las babosadas disminuirían su rating, trayendo a la vida otros como ¿Quién quiere ser millonario?, en los que la inteligencia y la memoria son protagonistas. Ya pueden imaginarse a todas las mujeres corriendo tras los participantes en las calles, ¡fìrmame el tronco encefálico!, no, ¡mejor la médula espinal! Paulo Laserna sería el gran gurú, no hay duda de aquello. En los Fashion show se dejaría de exhibir los cuerpos, Victoria´s Secret quebraría y por primera vez en Miss Universo las modelos desclasificarían si no responden de manera inteligente. Sus curvas no importarían.

Las listas de los solteros más cotizados estarían ocupadas por personas cuyo IQ supere los 130 puntos, la mejor escuela para esto: las universidades, pues es en donde se cruza la delgada línea entre saber y ser intelectual. Pueden ahora recordar a aquella compañera de clase que vivía tragada de su profesor, que no faltaba a ninguna clase, todo porque la coherencia con que hablaba su tutor despertaba en ella su lado oscuro. ¡Tráigannos un mapa conceptual que queremos organizar esta conquista!

Mejor dicho imaginen un mundo en el que tan solo con mostrarse pilo se pueda levantar a quien quiera, usted solo hable que a sus pies llegarán los pretendientes. Por ahora investigue un par de datos curiosos, empléelos en una conversación, riéguese en prosa y espere pacientemente porque estará a punto de cumplir sus más profundos deseos. Esa persona con la que tanto soñó está a unas cuantas palabras de caer rendida en sus brazos, pero mientras sucede corra al primer gimnasio encefálico, ejercite su cerebro, cerebelo y bulbo raquídeo que ya está listo para salir a conquistar.

Filed Under: Revista Secciones, What if

Reader Interactions

Deja un comentario Cancelar respuesta

Tu dirección de correo electrónico no será publicada. Los campos obligatorios están marcados con *

Primary Sidebar

  • Revista Secciones
    • Central
    • Ctrl+Alt+Supr
    • Opinión
    • Password
    • Placard
    • Plazoleta
    • Shuffle
    • TimeCode
    • Spotlight
    • What if
  • Edición Nº 50Fútbol-era/ Mayo 2018
  • El Parche Las mentes de MP
  • Actualidad
    • Noticias
    • Eventos y Concursos
    • Virales
    • Datos Cocteleros
  • Editorial
    • Crónica
    • Entrevistas
    • Ficción
    • Reportaje
  • Gráfico
  • Educación
    • Becas y Convocatorias
    • Inscripciones
    • La U
  • Blog
    • “1, 2, TIC” – Wilson Escobar
    • “Básicamente” – Camilo Márquez
    • “Cinenfermos” – André Didyme-Dôme Fuentes
    • “Temazo” – Jorge Asmar
    • “Top Mode” – Sandra Franco
    • “Intemporal”

Siguenos en:

Siguenos en Facebook Fútbol en Instagram para ti Siguenos en Twitter Siguenos en Behance

Siguenos en:

Siguenos en Facebook Fútbol en Instagram para ti Siguenos en Twitter Siguenos en Behance

Copyright © 2021 · Magazine Pro on Genesis Framework · WordPress · Log in